Definitivamente, Internet se ha vuelto más móvil que nunca. En 2020 las webs que quieran triunfar entre los usuarios que las visitan deben poder verse de manera óptima tanto en ordenador como en los diferentes tamaños de dispositivos móviles, desde donde masivamente se consulta internet a diario.
Estos pequeños dispositivos son muy diversos y de distintos tamaños. Esto supone un reto para los diseñadores que, más allá de proporcionar un diseño ‘responsive’, deben adaptarse a las necesidades y gustos de los usuarios.
Si quieres conocer cómo mejorar la experiencia de usuario de las webs que gestionas y mejorar tu tasa de conversión de ventas ¡sigue leyendo!
Diseños en función del dispositivo
Está demostrado que el tipo de navegación que realiza el usuario varía en función del dispositivo.
Así, por ejemplo, quienes consultan internet desde un ordenador lo hacen habitualmente para ‘navegar’ por la Web. En cambio, quienes lo hacen desde un dispositivo móvil son más proclives a llevar a cabo algún tipo de acción (llamar, solicitar información, comprar…).
Por eso, las versiones móviles de las webs deben contar con botones de llamada a la acción atractivos y altamente visibles.
Facilitar la ‘interacción’
Cuando se diseña una web, hay que tener en cuenta que la mayoría de personas que navegan a través de sus smartphones utiliza sus dedos para interactuar.
Es un aspecto importante a tener en cuenta para facilitarle la navegación.
Por ello, conviene asegurarse de que todos los elementos sobre los que el usuario tenga que interactuar (botones, barras de scroll, flechas…) tienen el tamaño suficiente para poder manejarse con el tacto.
Para llamar la atención, la información importante debe estar en el encabezado
En los sitios móviles, el encabezado ocupa gran parte de la pantalla disponible. Conviene aprovechar este espacio para introducir llamadas a la acción y asegurarse de que este encabezado estará visible cuando los usuarios se desplacen por la web.
Por ejemplo, si el objetivo principal de la versión móvil de un sitio web es que los usuarios puedan llamar a su empresa, conviene mantener esa opción altamente visible durante la navegación del usuario.
No decepcione al usuario
Puede que el negocio haya cerrado hasta el día siguiente, pero internet no lo hace nunca.
Un usuario se sentirá decepcionado si pulsa el botón de llamada y no hay nadie que conteste el teléfono. Y, a no ser que tenga un interés específico en el negocio, probablemente no volverá a contactar.
Por eso, es muy importante adaptar las llamadas a la acción en función de la hora del día, de tal modo que, fuera del horario comercial, el botón llamada se pueda sustituir por un formulario de contacto.